sábado, 17 de enero de 2009

Mi despedida a Martín Lobo.

Querido Martín:

Como nunca he sido ferviente seguidora tuya ni fan incondicional, no creo merecer el puesto entre tus despedidas más apreciadas o notables, como escribiste en tu último blog, pero quería hacerte mi ovación particular en este mi pequeño espacio que casi recién inauguro, y que aún no se muy bien ni hacia donde enfocar. En fin, todo se verá con el tiempo.

Seré breve: realmente voy a echar de menos abrir elmundo.com (además yo soy más de elpais.com), y ver tu entrada de turno en la sección de blogs, o mejor dicho que mi maridín me diga “¿has leído lo último de Blogback Mountain?”, porque si no fuera por él, que sí es más de elmundo.com, nunca te habría leído.

El caso es que me he reído tanto con tus entradas, con tus comentarios afilados y tajantes y tu lengua viperina que no me parece justo que simplemente decidas echar el candado y a otra cosa mariposa. Como seguidora relativamente nueva de tu blog reclamo una continuidad que se que no se va a dar, pero por reclamar que no quede, que es gratis. Nada más.


Encantada de haberte leído.


No hay comentarios:

Publicar un comentario